domingo, 20 de febrero de 2011

No hay nada que haga sonreir

Digamos que ya no se puede confiar en nadie ni siquiera cuando jura por sus propios padres. Me da mucho asco que se haya perdido tanto el valor de la palabra, pero en fin.. no pienso gastar tiempo en gente que lo único que merece es desgracia.
Quise alejarme por una semana al menos de la computadora, no facebook, no msn, pero bueno, el vicio pudo más, no pude evitar conectarme de nuevo. Mi vida después de caer en un pozo depresivo -sin lágrimas por suerte, pero depresivo al fin- es una mismísima mierda.
Para que se den cuenta como me siento voy a pasar a dar una situación que ejemplifica: El sabado estaba de mal humor, mamá quiso ir a caminar y le dije 'bueno, te acompaño', tenía intención de despejarme pero convengamos que no dio un buen resultado. Me pasé esa hora que estuvimos dando vueltas con mi mejor cara de orto, y ver a francis con aún más cara de orto no me alegró mucho el día que digamos. Tenía tal mal humor, que no hablaba (los que me conocen saben que soy una de las personas que más habla), entré a Cook, vi el short de mickey que me gusta, se lo mostré a mi mamá, salimos, y en tono de duda me dice "está tu talle?" para comprármelo. SABEN QUÉ LE DIJE? "no sé, no voy a volver y probarme, ya está", O SEA LE DIJE QUE NO AL SHORT DE MIS SUEÑOS, segundo punto preocupante. Salimos de ahí y mi mamá me ofreció comprar comida en Mc, a lo cual también le dije que no, OTRO PUNTO RARO, AMO LA COMIDA DE MC, pero me insistió tanto que dije 'está bien, porque más tarde me va a dar hambre y voy a atacar lo que venga', y me compré sólo una hamburguesa con queso simple con papas medianas. Nada, básicamente, con esos ejemplos, vean mi depresión.
Tengo dos planes para lo que queda de la noche: mirar glee como una pobre fracasada y ser una loser más de su club, o sacarme fotos ya que estoy vestida, pero ¿para qué? ¿para quién?

No hay comentarios:

Publicar un comentario